miércoles, 28 de octubre de 2015

10 MANERAS DE RECORDAR Y HONRAR A NUESTROS SERES QUERIDOS


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Honrar la memoria de nuestros seres queridos es muy importante para todos los que hemos perdido a alguien. Nos negamos a olvidarles y los llevamos siempre en nuestro corazón. Hemos comprendido que necesitamos celebrar sus vidas y recordar siempre todo lo que ellos significaron para nosotros.

Estas son algunas de esas maneras de recordar y honrar a aquellas personas que amamos:

Flores sobre la tumba:
Esta es la manera más tradicional de honrar sus vidas. Se suele hacer en el día del aniversario de su muerte, y en muchos países, en el día de Todos los Santos (1 de Noviembre).

Plantar un árbol en su honor:
Un árbol es un recuerdo que perdurará en el futuro. Si el árbol es de los que echan flores en primavera, ¡qué hermoso recuerdo de la dulzura y alegría que esa persona trajo a nuestra vida! Puedes poner, en la base, una placa con su nombre.

Encender una vela en su honor:
Colocar una vela en la ventana, cada noche, donde todos puedan ver la luz. Simboliza que la persona es recordada en ese hogar. También se puede mantener una vela encendida durante todo el día, en el aniversario de su muerte.

Terminar su proyecto: 
Si la persona fallecida tenía un proyecto que no pudo terminar antes de morir, completarlo en su nombre será una manera de recordarle y de dar importancia a sus sueños.

Un tatuaje en su honor:
Muchas personas se tatúan su nombre, su retrato, una flor, una frase, una fecha, etc. El tatuaje permanece para siempre, por eso es tan significativo.

Recordarles con joyería:
Usar su anillo, su collar o su reloj, por ejemplo, es una manera de tener algo de esa persona siempre contigo. También hay múltiples artículos de joyería diseñados exclusivamente para recordar a nuestros seres queridos.

A MI MEJOR AMIGA QUE ESTÁ EN EL CIELO






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Querida amiga:

Seguramente desde donde estás confirmarás que te recuerdo aunque ya hayan pasado tantos años de tu partida.
Es imposible olvidarme de todas las cosas que compartimos juntas, por eso quiero elevarte junto a una oración estas palabras que me nacieron del alma y del corazón.

Aún recuerdo tus ojos siempre alegres, como tu rostro se iluminaba cuando el amor de tu vida te regalaba una rosa. Recuerdo tu piel clara como la blanca paloma de la paz, siempre conmigo, poniendo a mi pena las alas y colores de tus palabras, siempre acompañando mis alegrías con tu sencilla luz de la verdad. Tenías la belleza de un ángel, eras el hombro en el que lloré abatida y hoy en este día te recuerdo con nostalgia…

A tu sombra yo confié mis secretos, a tu consuelo mi llanto a tu alegría mi alegría. Hoy caen sobre mí el dolor y la tristeza, el desenfrenado cansancio del recuerdo, fuiste mi amiga y un día te marchaste como el sol que se oculta al final de un camino, creí en aquel momento que era un sueño tu partida pero cuando lloró el cielo pardo conmigo descubrí que tu sueño era un viento infinito…

Hace tiempo que la muerte te ha convertido en distancia, hace tiempo tambien que mi vida sigue sin tu amistad, mi corazón te nombra y en el tiempo te recuerdo, solo me queda pedirle a Dios que te guarde en su Reino y que te permita recordar todos y cada uno de los momentos que vivimos durante el tiempo que duró nuestra amistad.

Espero amiga del alma, que a esta carta la leas sentada en una nube de algodón rodeada de ángeles amigos. Tú amiga por siempre y para siempre.